Me encomiendo al abismo de tus sombras,
le rezo a la curia soberbia de tu esencia.
Atea que cree en los milagros de la carne,
agnóstica que conoce a Dios en cada beso.
Rezo, rezo, rezo.
Soy pecadora,
confieso,
blasfemias de tu cuerpo
me condenan al calor de tus infiernos
Oleadas sofocantes, sudor candente…
Condenada estoy,
mas siento haber tocado el cielo
Y rezo, rezo, rezo…
Ay...qué dulce pasión reflejan tus versos.
ResponderEliminarUn abrazo
Jajaja, bueno, no sé si tan dulce!! Un besote
EliminarEva, espectacular, soberbia, ya te estaba esperando. Un beso muy muy fuerte.
ResponderEliminarYa ves cuándo contesto! Si es que no tengo tiempo ni ordenador disponible!! Mil besotes
EliminarHay muchas formas de creer: muchos dioses posibles. Hasta Él estaría de acuerdo, y dudo mucho que se ofendiese ante la observancia rendida al Amor. Besos.
ResponderEliminarSí, hay muchos dioses posibles... En lo más espiritual,el amor, la muerte... todos somos iguales, creo yo!
EliminarPreciosos versos, a Dios cada uno lo siente de manera diferente, rezar libera...
ResponderEliminarBesitos
Gracias Luján, por estar ahí. Sí Dios existe, escucha todas las variantes del rezo y las entiende
EliminarHola Eva:
ResponderEliminarAnte todo gracias por tu visita.
Excelentes letras, con mucha fuerza y soberbia.
Abrazos alados!
Muchas gracias a ti, Diana. Un besote
EliminarGracias, Eva, por tu comentario. Un gran abrazo.
ResponderEliminarSiempre es un placer visitar tu blog!!
EliminarImpresionante Eva, felicidades un beso fuerte.
ResponderEliminarBesotes Julia!
EliminarBonitos versos escribes. Felicidades. Saludos desde Conil ( Cadiz). ve mi blog
ResponderEliminarGracias Jesús por tu paso por aquí!! Espero verte más! Un abrazo
EliminarMe ha encantado, Eva. A veces el amor roza la mística y tú, aquí, lo reflejas muy bien.
ResponderEliminarEnhorabuena
Un beso
Ana
Gracias Ana, viniendo de ti, es todo un halago; no creo que pueda reflejar esa mística tan bien como lo haces tú. Un placer. Un besote
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